Si la razón fuera más fuerte que el corazón no te pensaría a cada instante. Mi corazón que anhela tener voz y gritar cuánto te extraña y te desea. El hecho de flajelarme y no expresarte mis sentimientos dejan en evidencia a mi corazón orgulloso. Y en el fondo guardo esa esperanza de juntarnos nuevamente y caer en la tentación de perder la cordura y comernos a besos, sin importar nuestro pasado y presente, el instante es nuestro, hacemos que el mundo sea nuestro y las horas también. Eres el desconocido de mi razón, el conocido de mi corazón.
Necio sentimiento. Tus besos con sabor a lluvia porque saben a paz, aún los guardo en mi memoria. Lo cuál es muy necio de mis sentimientos porque todo tú eres sensillo y elemental, como el agua, no me sabes a nada, sin embargo calmas mi sed. Le das vida a mis emociones. Por más que intento no idealizarte, no logro dejar de verte como alguien que le da adrenalina a mis sentidos. Y esos instantes en los que somos desconocidos, pero ese algo nos une. Tan tu sola presencia me envía cierta conección. Basta con verte para volver a sentirla.